Pequeño altercado

    

 jueves 24 de noviembre de 2011  

    Hoy hemos tenido un pequeño altercado con Mora…

    Hacía mucho calor y habíamos estado a la mañana en la mesita chica en la parte del frente de la galería, donde siempre corre aire y está fresco. Ella pintaba con acuarela y yo hacía sudokus. El paraíso.

Hizo una familia de serpientes: había una que era la mamá, otra el papá, otras dos hermanos y una le salió larga: “un adulto” dijo.

   Le pregunté qué quería ser cuando fuera grande, si iba a pintar como la tía Cadu o jugar al tenis como la tía Mechi o ser ingeniera como sus papás. Ella dijo que por ahora va a pintar, pero que después, de grande, va a ser como sus papás. Es una nena feliz!

  En la mesa donde estamos siempre daba todo el reflejo del sol. Pero no sé porqué cuando iba a llevar la comida al mismo lugar donde estábamos, se le antojó que quería comer en “la mesa grande”. Yo le dije que ella fuera adonde quisiera, pero que a mí me hacía mal estar en el lugar que hacía tanto calor y que yo iba a comer en la mesita. Entonces rompió a llorar. “Yo quiero comer en la mesa grande…con vos…” sollozaba y se fue hasta cerca del lavadero llorando desconsoladamente… Yo no aflojé, no le hice caso y con tranquilidad traté de distraerla “Mirá esa calandria, tiene algo en el alita…” “Querés ponerle sal a la comida?” y cosas así. Arreciaba el llanto y yo me senté a comer.  Entonces se fue acercando de a pocos y me decía, siempre sollozando, “Tengo mucho frío acá!” y se agarraba los brazos como tiritando (¡!) Fue cómico. “Querés que te traiga un buzo?” le dije sin alterarme…Al fin me pidió agua y “se rindió”. Se sentó a comer, pero en mis faldas…

    Quiso que le pusiera tomate para probarlo, ya la otra vez había comido medio tomatito cherry, pero sólo chupó un pedacito (es tan reacia a probar cosas nuevas!). Sólo comió la carne y al final le dije que comiera un bocado y le diera otro a Moni. Le gustó el juego y así logré que comiera un poquito más (Moni en la gloria!). Después vino el infaltable arroz con leche y nos fuimos al jardín. 

Fotos del sábado pasado, fiesta del cumpleaños número 4 en casa

 

   

Diálogos con la Virgen

nov/2011

Siempre le ponemos flores a “la Vigen” y ella le dice “hola” despacito.

A veces la espío y veo que “dialoga” con la Virgen, le conversa como en secreto… Hoy me preguntó si Ella la oía y yo le dije que sí, aunque no tenía oídos y cuerpo como nosotros. “Entonces, es un espíritu?” me dijo… “Algo así” le dije yo.

El otro día, después de ponerle flores, me dice (como en secreto y con cara de pícara): “Le voy a hacer un chiste” . Y después, mirando a la Virgen, le dice “Adiós”, se ríe y dice ”No, era hola!”…

De dónde saca esas expresiones??

27/oct/2011

Quiero anotar las expresiones de Mora antes de olvidarme:

-Venía al jardín a cortar hojas y flores y decía (varias veces) “Voy en busca de…”

-Me dice “decoré tu casa” (puso una hojita violeta del prunus arriba de la cajita lila),

-Sale afuera y dice: “El sol está brillando como una cuchara” (¡!).

nov/2011

Jugaba con unos retacitos de tela de algo que yo estaba cosiendo, uno que tenía como una colita y dos triangulares, chiquitos. Inventó una historia: el de la colita era un pez al que perseguían los dos triangulitos que eran las almejas,… hasta que se lo comían. Después las almejas pasaban a ser las aletas del pez. Después juntó los tres retazos en sus manitos, los apretó y dijo: “Es un pajarito, está aprendiendo a volar…” Los soltó y al ver los retazos en el suelo, dijo: “Se despedazó!...” Estuvimos como media hora inventando historias con los tres retacitos de tela…

Creo que va a ser escritora…Con esa imaginación y ese lenguaje!

Una Noche difícil

23/oct/2011

Anoche se quedó a dormir.

No resultó muy bien la cosa: quiso ver las películas que había traído. Era más de la una y yo me caía de sueño. Le dije que me iba a dormir, me fui y, ante mi sorpresa, ella siguió viendo la película lo más pancha. Se la adelanté y cuando terminó vino a la cama conmigo. Después lloriqueaba y decía: “no quiero tener sueño” y después: “no estoy bien” y “tengo muuuucha hambre” (aunque había comido más o menos bien, le llevé arroz con leche y lo comió). Al fin se durmió (casi a las 2), pero hablaba dormida, se movía,(estábamos en mi cama)… a las 8 ya se despertó. Le pregunté si a la noche extrañaba a su mamá y me dijo que sí. Estuvo bien durante el día hasta que llegaron sus papás, cuando ella dormía la siesta. El día culminó cuando SE HIZO PIS EN MI CAMA!