viernes, 29 de abril de 2011

Los jueves


Mis jueves son propiedad exclusiva de Mora (aunque a veces rezongo un poco por defender mi tiempo, no soy una abuela modelo...) Pero de hecho, cuando la tengo conmigo disfruto muchísimo de sus ocurrencias y su alegría. Su encanto me "pone del revés": me hago la payasa, bailo, canto...

Es increíble cómo ha crecido, en altura (es un fideo!) , en vocabulario,... A veces uno se da cuenta de que sabe cómo conseguir sutilmente lo que quiere. A quién le hace un berrinche, a quién le coquetea...


Ayer, 17/2/2011, cuando jugaba con un muñequito (“la mole Moli”) que hace ruido, dice: “Mejor lo dejamos, porque es medio cansador”… Una adulta!

Y después, cuando veía llegar a Juana Inés, le digo “quién viene?” “ es mi madre” (pronuncia “made”) me contesta…”Y cómo se llama tu mamá?” “Juana” me dice, “Juana mami” aclara. Y después “vos sos la madre de ella”. La tiene clara, no?

24/2:

Los pañales! Un poco abruptamente, se los hemos sacado. El lunes empieza otra etapa de su vida: el jardín de infantes. La maestra dice que no hay que dar doble mensaje, poniéndoselos a veces. Pero todavía a veces se hace pis y no digamos popó. El otro día la había dejado desnudita (hacía un calor terrible y yo iba a ponerle la malla) cuando me dice: “hice popó” y había hecho en el patio!…Por suerte estaba la madre: yo me llevé la mejor parte llevándola a ella al baño para lavarla, Juana Inés limpió el patio.

La expresión de hoy “Lo logré!” (cuando realmente había logrado algo).

Mientras juega, canta. Inventa cuentos super imaginativos, donde por ejemplo el papá le cabe en la palma de la mano, y hay un “mostro”, o una princesa…

"Mirá qué cara pongo" (a Clara que le sacaba la foto):

3/3

El nuevo jardín “el jardín de los nenes grandes” le gusta!!! No ha llorado ni un día!

Ayer la fui a buscar por primera vez. Era una tarde preciosa y vinimos a pie sin problemas (salvo un pis que se escapó por el camino…) Después estuvo deliciosa. Charlando, cantando, saludando: “como me enseñó tía Cadu” después de cada canción (paradita, pone una mano en el estómago y la otra atrás y se inclina, ceremoniosa…) Cuando ya era de noche y yo le mostraba las estrellas, me dice: “yo tengo un sueño: que mi mamá me venga a buscar y me lleve a casa…” Por suerte en seguida llegó ella.

10/3

Salimos del jardín y me dice: “Ahora me das la mano (me la toma) porque tenemos que cruzar la calle”. Vino charlando hasta por los codos: “Tu casa está cerca. Moni me está esperando, porque me extraña”. Cuando llegamos le propongo: “Vamos a ver mi casita nueva? Ya tiene techo (de telgopor, por ahora)”. Y fuimos. Allí me dice (se acordaba!): “En tu casa hay un cuarto con una cama para y otro cuarto con una cama para mí”. Le encantó, no se quería venir. Agarró un pedacito de telgopor y sacaba las bolitas minúsculas y las desparramaba contentísima. “Es picado lunar” me dijo (de dónde habrá sacado eso?).

Después propuso barrer el patio (es muy pulcra) y yo le digo: “Pero hay una sola escoba” “Compartimos” me contesta, con un aire condescendiente… (eso será del jardín?).

Abril

Mora crece (en altura y en madurez) MUY rápido. Demasiado para los que disfrutamos de sus anécdotas y su espontaneidad.

Al salir del jardín le dice a la madre: “Maximiliano y yo nos damos besitos. Estamos enamorados” (!) Al preguntarle al día siguiente a la maestra, le comentó que Maximiliano, como no había ido a guardería, estaba adaptándose a estar con chicos: casi no hablaba, de repente los abrazaba, …Los chicos más bien le huían, sólo Mora lo “bancaba”, de ahí el romance.

El domingo de Pascua estábamos con Juana Inés y Mora en la construcción de mi casita nueva. Yo le decía a Mora (como jugábamos otras veces) que ella era la princesa. Entonces dice “Quiero que el príncipe me venga a rescatar”. Lo llamamos al “príncipe” (Nacho) pero ella no sé porqué empezó a llorar (probablemente nada la conformaba porque tenía sueño) y entonces Nacho cortó por lo sano y la llevó a la cama mientras ella lloraba sin parar. No se durmió y al rato fui a verla y estaba jugando en mi cuarto y me dice algo como: “Quiero que me rescate OTRO príncipe”… Estaba enojada con su papá (!)

Le gusta CONTAR. Me pedía que contara unos palillos. Se ponía contenta cuando yo seguía contando más allá de lo que ella sabía. Empieza a aprender a contar EN INGLÉS. Y también sabe ya los colores en inglés. Jugamos haciendo burbujas: le encantan! Fue difícil parar.

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